Monumento a Patricio Aylwin y Arturo Alessandri: ¿Cuál estilo será más efectivo para salir de la crisis actual por la que atraviesa Chile?

02 Diciembre 2022
Consultado en una entrevista por la figura de Alessandri, Aylwin reconoció que era “un animal político”, pero aseguró que no era su modelo a seguir, al ser muy arbitrario, impredecible y que “se las traía”.
Diego Escobedo >
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Monumento a Patricio Aylwin y Arturo Alessandri: ¿Cuál estilo será más efectivo?

Esta semana, finalmente fue inaugurada la estatua al presidente Patricio Aylwin. Merecido homenaje al Padre de la Democracia y a un líder que, con sus luces y sombras, se ganó tanto el respeto transversal de aliados y adversarios, como el título de estadista.

Haciendo un rápido análisis del monumento, destaca la postura en la que se yergue Aylwin, sonriente y con lo brazos abiertos, fiel a su estilo conciliador, y padre (hoy diríamos abuelo) de la “gran familia chilena”. La frase escogida para el pedestal va en la misma línea, pero deja entrever, a su vez, una serie de conflictos: “La Patria Justa y Buena”. La frase original data del famoso primer discurso presidencial de Patricio Aylwin en el Estadio Nacional, recién asumido el gobierno en marzo de 1990. Dicha alocución la terminaba sentenciando: “La tarea es hermosa: construir entre todos la Patria que queremos, libre, justa y buena para todos los chilenos. De nosotros depende, compatriotas”.

Podemos imaginarnos lo largo y debatido que fue el proceso deliberativo para dar con esa frase. Del mismo discurso, se podía rescatar una de sus frases más notables: “Civiles y militares, Chile es uno solo”. En el anverso, también tenemos su tristemente célebre “en la medida de lo posible”. En lugar de eso, se optó por una cita mucho más rebuscada, y alterada del texto original. ¿Por qué se eliminó la palabra “Libertad”? ¿Por un asunto estético, de espacio, o es que ya no es tema y la damos como algo dado, que no volveremos a perder? Si la respuesta es esta última, es una mala señal para la centroizquierda chilena, que sigue entregando en bandeja a la derecha un concepto tan universal como el de “Libertad”. Sin Justicia, no hay Libertad, y viceversa. 

Otra de las cosas a destacar es la ubicación de su monumento, nada menos que al lado de otro gran estadista, don Arturo Alessandri Palma. ¿A Aylwin le hubiese gustado ser equiparado con el “León”? Consultado en una entrevista por la figura de Alessandri, Aylwin reconoció que era “un animal político”, pero aseguró que no era su modelo a seguir, al ser muy arbitrario, impredecible y que “se las traía”.

Mientras que el patio norte de La Moneda aspira a mostrar el disenso propio de la democracia (con los tres tercios representados en Jorge Alessandri Rodríguez, Eduardo Frei Montalva y Salvador Allende, representando a la derecha, el centro y la izquierda respectivamente, más el recientemente incorporado Pedro Aguirre Cerda, del Partido Radical), el objetivo del patio sur parece ser mostrar el consenso. Si bien estos dos gobernantes moldearon al Estado e inauguraron largas épocas de consenso democrático, lo hicieron con estilos muy distintos.

Uno fue populista, y el otro socialcristiano. El primero era mujeriego, no creía en Dios, y fue un padre autoritario y exigente; mientras que el segundo fue un católico devoto y hombre de familia toda su vida. Alessandri tuvo a su haber las matanzas de La Coruña, San Gregorio y el Seguro Obrero (irónicamente, su frase más célebre era “el odio nada engendra, solo el amor es fecundo”), mientras que Aylwin le dio al país el Informe Retting. Don Arturo logró darle a Chile una nueva constitución, aunque bajo la tutela de los militares; mientras que Don Patricio se conformó con reformar la constitución que heredó de los militares. 

Mirando a las grandes Alamedas, en el patio más selecto y privilegiado del Palacio de Gobierno (la “casa donde tanto se sufre”, diría el León), los chilenos tenemos dos modelos de estadista muy distintos para escoger. ¿Cuál nos será más útil para los nuevos tiempos? ¿Cuál estilo será más efectivo para salir de la crisis actual por la que atraviesa nuestro país? Lo mejor es que trabajemos, todas y todos juntos, para que el camino a seguir sea una combinación que rescate todo lo positivo, y solo lo positivo de ambos mandatarios. O como diría el mismo Aylwin: “Conservar lo bueno, corregir lo malo, y mejorar lo regular”.