7 razones por las que es importante trabajar la expresión corporal en pacientes TEA

Aún hay mucho camino por recorrer en cuanto a las razones médicas que acompañan un diagnóstico de autismo; como el nombre lo indica, se trata de un espectro que se manifiesta de manera distinta en cada paciente, así que es una neurodivergencia muy compleja. Lo que sí está claro es que muchas personas autistas presentan dificultades de comunicación verbal o desarrollo del lenguaje. De hecho, según Espacio Autismo, alrededor del 20% de los niños con TEA no son hablantes, es decir, su comunicación es no verbal, por lo que un abordaje empático desde terapia ocupacional, fonoaudiología y otras especialidades capaces de ayudar a desarrollar estrategias de lenguaje corporal es esencial. 

Cuando hablamos de comunicación, tendemos a enfocarnos principalmente en el lenguaje verbal: las palabras que decimos y cómo las decimos. Sin embargo, para las personas dentro del espectro autista, el uso del cuerpo y los gestos juega un papel crucial en la forma en que interpretan el mundo que les rodea y se relacionan con los demás. Su cuerpo se convierte en el canal de comunicación que sustituye a la voz para dar lugar a métodos de comunicación alternativos y aumentativos, pues, al ser un trastorno que viene dado por la dificultad en las relaciones sociales, es menester que puedan lograr autonomía, entendiendo sus emociones y empleando su cuerpo para expresarlas En este artículo, explicaremos siete razones por las que es fundamental prestar atención al lenguaje no verbal en pacientes con autismo, y cómo esto puede marcar la diferencia en su calidad de vida y bienestar.

1. Comunicación no verbal como canal de comunicación

Para las personas dentro del espectro autista que tienen dificultades con la comunicación verbal, el lenguaje corporal se convierte en un canal invaluable para expresar sus necesidades, deseos y emociones. Aprender a interpretar y responder al lenguaje no verbal de estos pacientes puede facilitar la comunicación y fortalecer la conexión entre el paciente y el cuidador o terapeuta.

2. Facilita la comprensión de las emociones

El lenguaje corporal puede ser un indicador poderoso de las emociones de una persona, aunque también puede estar delimitado por los tipos de personalidad, que forman las conductas de cada individuo. Para los pacientes dentro del espectro autista que pueden tener dificultades para identificar y expresar sus propias emociones, aprender a leer las señales no verbales puede ayudarles a comprender mejor sus propios sentimientos y los de los demás, lo que a su vez puede mejorar su bienestar emocional.

3. Mejora las habilidades sociales

La expresión corporal desempeña un papel fundamental en la interacción social, desde el contacto visual hasta el lenguaje gestual y la postura corporal. Al enseñar a los pacientes con autismo a reconocer y utilizar estas señales no verbales, se pueden mejorar sus habilidades sociales y facilitar su integración en entornos sociales.

4. Ayuda en la regulación emocional

Para muchos pacientes dentro del espectro autista, regular sus emociones puede ser un desafío. El lenguaje corporal puede servir como una herramienta para ayudarles a identificar y gestionar sus emociones, proporcionándoles pistas visuales sobre cómo se sienten y cómo pueden responder de manera apropiada en diferentes situaciones.

5. Favorece el entendimiento del contexto social

Entender el lenguaje corporal es fundamental para comprender el contexto social en el que se encuentran las personas. Para los pacientes con autismo, que a menudo tienen dificultades para comprender las sutilezas de las interacciones sociales, aprender a leer las señales no verbales puede ayudarles a navegar de manera más efectiva en diferentes entornos, donde suele aparecer la ansiedad, el estrés y, por ende, las estereotipias.

6. Promueve la empatía y la conexión

La capacidad de leer y responder al lenguaje corporal de los demás es fundamental para desarrollar empatía y establecer conexiones significativas con los demás. Al enseñar a los pacientes con autismo a reconocer y responder al lenguaje no verbal, se les brinda la oportunidad de desarrollar relaciones más profundas y significativas con quienes les rodean.

7. Adaptación a diferentes tipos de personalidad

Cada persona dentro del espectro autista es única, con sus propias fortalezas, desafíos y preferencias. Al prestar atención al lenguaje corporal de cada paciente individual, los cuidadores y terapeutas pueden adaptar sus enfoques y estrategias de comunicación para satisfacer las necesidades específicas de cada persona, promoviendo así un ambiente de apoyo y comprensión.

En conclusión, juega un papel fundamental en la vida de las personas dentro del espectro autista, tanto en su capacidad para comunicarse como en su bienestar emocional y social. Al prestar atención y responder de manera efectiva al lenguaje no verbal de estos pacientes, podemos mejorar su calidad de vida y promover su inclusión en la sociedad. ¡Cada gesto, cada expresión cuenta en el viaje hacia una comprensión más profunda y una conexión más significativa!

Foto de Tim Marshall en Unsplash