A 30 años de su visita recuerdan paso del Papa San Juan Pablo II en La Serena

A mediodía de este miércoles 5 de abril, los fieles de La Serena se congregaron en el templo Catedral para recordar con especial cariño y aprecio la Visita del Papa San Juan Pablo II a la región de Coquimbo. Y es que fue un domingo 5 de abril de 1987, cuando el Sumo Pontífice pisó tierra serenense para vivir el denominado “Encuentro con el Norte Chico”, en el cual participaron personas de la Arquidiócesis de La Serena, la diócesis de Copiapó y la Prelatura de Illapel.

De esta manera, y con la celebración de la Santa Misa, los feligreses rememoraron el histórico momento. La Eucaristía fue presidida por el Arzobispo de La Serena, Mons. René Rebolledo, quien manifestó: “son numerosas las expresiones de gratitud de los fieles en La Serena por la visita que hiciera hace 30 años a esta ciudad el Santo Padre San Juan Pablo II. La gente expresa que su presencia entre nosotros fue una gran bendición del Señor. De este modo, proseguimos en oración, solicitándole al Señor que bendiga a todas las familias de la Arquidiócesis, especialmente a las que por un motivo u otro están sufriendo. Le pedimos a San Juan Pablo II la gracia de poner en práctica su legado: un amor grande a Jesús el Señor, una especial preocupación por la familia y la vida, como también solicitud por los pobres y gran esmero en el desafío de la reconciliación”.

Posteriormente, los presentes se encaminaron en procesión hasta la plaza San Juan Pablo II, ubicada a un costado del templo, en donde frente a la placa conmemorativa por la ilustre visita, se realizó una romería, en la cual con cantos y oraciones se dio gracias al Señor por la oportunidad de haber recibido al santo católico, en el recordado encuentro que muchos de los presentes manifestaron presenciar.

Uno de ellos fue don José Chávez, Cacique Emérito de la Cofradía de los Bailes Religiosos del Santuario “Nuestra Señora del Rosario” de Andacollo, quien recordó: “tuve la posibilidad de verlo muy de cerca, por lo que agradezco al Señor. Fue un momento muy emocionante para nosotros, es algo que nunca me imaginé. Especial fue también la cercanía con los bailes religiosos, los que acudimos con gran entusiasmo junto a la chinita de Andacollo. Fue un orgullo para la zona contar con su presencia”.

Finalizado el acto conmemorativo, los feligreses entonaron con alegría y gratitud la canción: “Mensajero de la Vida, Peregrino de la Paz”, himno de la Visita del Santo Padre, que durante estos días se conmemoró su 30° aniversario.